"Pastito" cortado versus "pastito" sin cortar


PASTITO” CORTADO VERSUS “PASTITO” SIN CORTAR”

Por Nelso A. Torresi - Biólogo


En toda vivienda que tenga un patio de tierra en el fondo, o terreno vacío sin vivienda, crece espontáneamente el “pasto”, siendo este crecimiento más rápido con las temperaturas más altas de primavera-verano y deteniéndose en otoño-invierno. Este “pasto”, en su mayor parte está compuesto por plantas de la familia de las gramíneas, principalmente cuando se lo corta o sega frecuentemente, ya que sus raíces profundas y tallos rizomatosos les permiten vivir aunque la vegetación aérea sea reducida, pues estos tallos acumulan reservas. No ocurre así con otras plantas que al cortar la parte aérea generalmente se seca o brota con dificultad. Es por este motivo que el corte frecuente de la vegetación, favorecerá el desarrollo de las gramíneas en detrimento de las demás plantas, y solo quedarán estas gramíneas a modo de alfombra verde de “pasto” o  “césped”.
Esta práctica de corte frecuente del pasto es muy común en los pueblos donde abundan las viviendas tipo “casas” con amplio terreno. Hasta diría que es una práctica obsesiva, ya que existe el prejuicio de que no cortar el pasto en símbolo de dejadez, de desprolijidad. Puede ser que esto en alguna medida sea así, formando parte de nuestra cultura doméstica.
No obstante esta postura, respetable por cierto, ¿qué pasaría si no cortamos el pasto, si lo dejaríamos que crezca espontáneamente, sin ninguna intervención del hombre?
En primer lugar restableceríamos el equilibrio ecológico de ese microecosistema del patio o terreno, con las siguientes ventajas ecológicas y otras:
  • El pasto alto, sin cortar, mantiene mejor la humedad del suelo por la sombra que el mismo hace.
  • Mayor absorción de los rayos solares por el aumento de la biomasa verde, bajando así la temperatura del ambiente en verano.
  • Evita el lavado del suelo, ya que las gotas de lluvia caerán sobre la vegetación alta evitando así que caigan directamente sobre la vegetación cortada del suelo.
  • Reaparecerán plantas autóctonas extintas, nunca antes vistas.
  • Crecerán plantas comestibles como diente de león, llantén, yuyo colorado, plantas aromáticas, etc.
  • Creación de una fauna autóctona, especialmente de insectos.
  • Proveerá de flores con néctar y polen para las abejas y otros insectos polinizadores, y también de néctar a los colibríes.
  • Provee de alimentos a los pájaros como semillas, artrópodos, etc.
  • Se ahorra el costo por el trabajo que implica el cortado del pasto.
En síntesis: el pasto sin cortar crea un ecosistema digno de admiración, por su frescura y su aire perfumado proveniente de sus flores, el zumbido de los insectos, la belleza de las mariposas que revolotean sobre la vegetación y los colibríes yendo de flor en flor en busca del preciado néctar. Los pájaros también se acercarán en busca de alimentos y trinarán de alegría al ver esa diversidad de flora y fauna. 03/03/2019

No hay comentarios:

Publicar un comentario